
Boda en Btakora Lounge Restaurant Arenys de Mar
El pasado mes de agosto, uno de los mas cálidos que recuerdo, Lorena y Alberto se casaron en la playa con unas hermosas vistas al mar mediterráneo en Arenys de Mar. Se miraban con ese brillo en los ojos, característico de los enamorados. Fue una boda muy emotiva, romántica y llena de detalles. Con un atardecer precioso, en un marco incomparable. Una vez finalizada a ceremonia hicimos una sesión de fotos, dando un paseo por la playa y el espigón cercano. Gracias, pareja, por ser así y regalarme tantos momentos inolvidables para que los pueda capturar desde mi perspectiva fotográfica…y ahora poder compartirlos con todos vosotros.
Antes de terminar quisiera compartir los votos de los dos protagonistas. Naturales y reales, como ellos y su amor sincero, el auténtico motivo de celebración que hay detrás de una boda:
Y cómo lo vamos a hacer y cómo lo vamos hacer y cómo lo vamos a hacer…. Cariño esa ha sido tu frase favorita desde hace un año hasta hace un mes. Pues lo hemos hecho y mira dónde estamos. Te dije un día amor que después todo lo que habíamos conseguido juntos hasta la fecha, no dejaras de creer en todo lo que deseábamos hacer en un futuro; hasta hoy como pareja y a partir de hoy como marido y mujer. A ello me contestaste muy decidida que podíamos con esto y mucho mas, que lo haríamos y gracias al pensar así estamos aquí. Hoy estoy aquí para decirte si. Pero antes de ello quiero agradecerte todo aquello que me has dado enseñado y aportado. Pero sobretodo gracias por haberme enseñado, a ver la importancia en esta vida en lo que de verdad se le tiene que dar. A querer cuidar a aquello y aquellos quien de verdad lo merecen. Y finalmente amor agradecerte todo aquello que me has aportado. De todo ello me quedo con el sentimiento familiar que me has aportado. Gracias a ti y a esa personita, a día de hoy sé de la importancia de la familia y de su valor a lo largo de toda nuestra vida. Por todo ello gracias. I sí hoy te digo sí quiero, hoy digo sí a casarme contigo. No solo contigo sino con la familia que un día me presentaste y quiero que forme parte de nuestra unión para toda la vida, tanto los que están aquí como los que no están con nosotros. Hoy te digo sí; sí quiero pasar el resto de mi vida contigo, te amo.
Hoy hace seis años y tres meses que empezó nuestra aventura juntos. Aún recuerdo esa primera noche que quedamos y viniste tarde con las manos negras porqué habías pinchado rueda. Al principio no lo tenía nada claro, tú no me lo ponías fácil y yo no estaba para tonterías. Pero algo había en ti que me decía que solo era cuestión de esperar, y porque no decirlo, en el fondo me gustaban los retos. Y ese reto resultó ser el amor de mi vida. Tenías esa parte de loquito que a la par de llegar a desquiciarme me enganchaba cada vez más a ti, y el tiempo hizo el resto. Me enamoré de tu sonrisa, de tus locuras, de tus buenos días princesa y poco a poco fuimos construyendo sueños juntos. Gracias por apoyarme siempre, por ir los dos a una, por mi mejor regalo de navidad, nuestro Luca, con él empezamos a ser una familia. Gracias por conseguir hacerme reír en los momentos difíciles, por entenderme aunque se que no siempre soy fácil, por hacerme disfrutar de unos abuelos que a mí siempre me habían faltado, gracias por mi pedida de mano y hacerme sentir princesa por un día, gracias por ser tu y con ello llenarme tanto. Cuando ya pensaba que no podía quererte más, nació Daniela y me volví a enamorar aún más de ti. De cómo la mirabas, de cómo se te caía la baba con sus primeras sonrisas y primeros papá, de que resultaste ser un experto en cambiar pañales y dar biberones y que cada vez que la miro te veo a ti, con esos ojitos de bicho y sonrisa picarona. Y aquí estamos hoy, cumpliendo un sueño más. Y sí digo mil veces sí, a que quiero pasar el resto de mi vida contigo, que quiero envejecer a tu lado y que si volviera a nacer volvería a escogerte a ti como mi compañero de viaje, te quiero.